La serie contará el el caso real del robo del 70 % del suministro mundial de sirope de arce en 2011 y 2012.
La actriz Jamie Lee Curtis será la productora ejecutiva y estrella invitada de la serie de comedia “The Sticky”, inspirada en el robo de aproximadamente tres toneladas de sirope de arce en Quebec en 2011 y 2012.
La recién ganadora del Óscar será parte del elenco conformado también por Margo Martindale (“Paris, je t’aime, 2006), Chris Diamantopoulos (“True Story”, 2021) y Guillaume Cyr (“L’Imposteur”, 2016), informó la plataforma Prime Video por medio de un comunicado.
La dirección de la serie, creada por Brian Donovan (“Kelly’s Hollywood”, 2015) y Ed Herro (“American Housewife”, 2017), correrá a cargo de Michael Dowse (“What If”, 2013) y Joyce Wong (“Wexford Plaza”, 2016).
Además de Prime Video, “The Sticky” también tiene como socias a las productoras Blumhouse Television, Megamix, Sphere Media y Comet Pictures, esta última propiedad de Curtis.
El desarrollo de la serie inspirada en el caso real del robo del 70 % del suministro mundial de sirope de arce ya se está llevando a cabo en la ciudad de Montreal de la provincia de Quebec, Canadá.
La serie retrata a la competente agricultora de jarabe Ruth Landry -interpretada por Martindale-, quien cansada de la burocracia de su país y la amenaza de perder su granja decide cambiar su destino y el de su comunidad con el robo de millones de dólares en sirope de arce.
INSPIRADO EN UN HECHO REAL
En julio de 2011 la Policía canadiense descubrió el robo de casi 10.000 barriles de sirope de arce -valorados en 22,3 millones de dólares estadounidenses- de uno de los almacenes situados en la localidad de Saint-Louis-de-Blanford, entre Montreal y la ciudad de Quebec.
El autor del mayor robo de sirope de arce de la historia del país norteamericano fue Richard Vallières, quien con la ayuda de más de dos decenas de cómplices se las ingenió para sustituir durante meses el contenido de los barriles por agua.
Tras meses de investigación, la Policía canadiense detuvo a Vallières y a otras 25 personas y recuperó el 65 % del producto.
En 2017, el autor del hurto enfrentó un juicio en el que declaró haber vendido el sirope de arce robado por 8 millones de dólares y en 2022 fue sentenciado a siete años y 10 meses de prisión por robo, fraude y tráfico de mercancías robadas, así como al pago de una multa por el valor del sirope de arce que no fue recuperado.
La historia ya había sido contada en uno de los capítulos de la serie documental de Netflix presentada por Alex Gibney “Dirty Money”.
EFE