Unos espectadores de un zoológico de Estados Unidos grabaron el momento justo cuando los gigantes animales buscan resguardarse de un fuerte aguacero, acudiendo a una práctica muy inteligente.
De la manera más cuidadosa, los gorilas se desplazan por todo el borde de una pared donde alcanza a cubrir un diminuto techo, uno a uno pasan por la misma ruta que lo hizo el primero, incluso a la curiosa práctica se suman una hembra y sus crías que también buscan un lugar seco.