Una adorable madre llegó a reunirse con sus pequeños luego de un rato de estar separados, sin embargo, la locura que provocaron hizo que su reacción fuera muy dura.
Cuando empezaron a brincar y a morderla mientras pasaba entre ellos se desesperó y les lanzó un fuerte gruñido, de inmediato se quedaron quietos e hicieron caso mientras la canina empezó a olerlos y saludarlos en medio de una tierna calma.