El ultraderechista José Antonio Kast y el diputado de izquierdas Gabriel Boric se disputarán la Presidencia de Chile en el balotaje del próximo 19 de diciembre tras lograr el 28,52 % y el 24,71 % de los votos, respectivamente, según el 58,28 % de las mesas escrutadas.
Es la primera vez desde al retorno a la democracia en 1990 que los partidos tradicionales de centroizquierda y centroderecha no pasan a la segunda vuelta.
Ambos tienen programas muy distintos, lo que obligará a los chilenos a elegir en diciembre entre el Gobierno más izquierdista desde Salvador Allende (1970-1973) o el más derechista desde la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
Boric, un diputado de 35 años y antiguo líder estudiantil que se define como ecologista, feminista y regionalista, quiere ampliar el papel del Estado hacia un modelo de bienestar parecido al de Europa.
Por su parte, Kast, un abogado católico de 55 años, busca reducir el papel del Estado, bajar impuestos, afrontar con mano dura la migración irregular y prohibir el matrimonio gay y todas las formas de aborto.
El polémico economista libertario Franco Parisi, quien reside en Estados Unidos y ni siquiera ha viajado a Chile para las elecciones, sigue siendo la sorpresa de la jornada, con el 13,47 % de los votos, de acuerdo al último recuento.
Parisi desplaza así al cuarto lugar a la carta de la centroizquierda, la democristiana Yasna Provoste (12,2 %), y empuja a la quinta posición al oficialista y exministro Sebastián Sichel (12,08 %).
“La centroizquierda no va a estar en la segunda vuelta y eso es doloroso para un proyecto político como el nuestro que siempre ha pensando en cómo tener una alternativa a un modelo neoliberal”, dijo Provoste, quien dejó en el aire su apoyo a Boric en el balotaje.
Quien sí lo anunció fue el Partido Socialista, su compañero de coalición en la antigua Concertación. “Hacemos un llamado a los chilenos a no desmerecer la amenaza que representa una opción de extrema derecha como eventual Mandatario en nuestro país”, indicó su presidente, Álvaro Elizalde.
Mucho más atrás y con menos del 8 % de los votos, quedan el progresista Marco Enríquez-Ominami y Eduardo Artés, de la izquierda radical. Efe