El arzobispo de Ibagué, Orlando Roa Barbosa, se encuentra en el ojo del huracán por las declaraciones sobre una figura indígena, a la que denominó “indio”, la cual está ubicada en el puente de La Vida, en la variante Ibagué – Cajamarca.
De acuerdo a Barbosa, en la zona “hay un signo que hay que quitar, es un indio que he visto aquí. No sé qué mensaje hayan querido dar al poner ese indio ahí”, asimismo anunció que debería reemplazarse con signos sagrados, pues considera que la figura es una representación maligna, de muerte y destrucción, que tiene que ver con los suicidios que se han presentado en la Variante.
Ante esto, Feliciano Valencia, senador del partido Movimiento Alternativo Indígena y Social- MAIS, rechazó estas declaraciones y pidió no estigmatizar a la comunidades.
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“En una sociedad democrática las declaraciones del arzobispo de Ibagué no tienen cabida. Un “indio sentado” no es símbolo de satanismo ni provoca suicidios. ¿Por qué, en vez de estigmatizar a los indígenas, no cuestiona a los gobernantes por la situación socioeconómica de Ibagué?”.
escribió en su cuenta de Twitter.
Por su parte, la presidenta de MAIS, Martha Peralta dijo que las palabras de Roa eran “puro racismo” y exigió a que el arzobispo se retractara. Ante la polémica, este martes el arzobispo se disculpó parcialmente y señaló que en ningún momento ha querido referirse a alguna comunidad indígena en sentido despectivo o discriminatorio, “con humildad, presento mis sentidas disculpas si mis palabras causaron malestar”, afirmó Barbosa.