El senador brasileño Ciro Nogueira, quien enfrenta varios procesos judiciales por sospechas de corrupción, aceptó este martes la invitación del presidente Jair Bolsonaro para ser el nuevo ministro de la Presidencia del Gobierno.
El nombramiento se enmarca dentro de una reforma ministerial anticipada por el líder ultraderechista y que tiene por objeto cimentar sus apoyos en el Congreso, en un momento de fuerte desgaste por la crisis sanitaria y económica provocada por la pandemia de la covid-19.
“Acabo de aceptar la honorable invitación para asumir el cargo de jefe de la Casa Civil (Ministerio de la Presidencia), hecha por el presidente Jair Bolsonaro”, anunció Nogueira en sus redes sociales, después de reunirse este martes con el mandatario.
Sustituirá en el cargo a Luiz Eduardo Ramos, general de la reserva del Ejército, de donde proceden alrededor de un tercio de los ministros de Bolsonaro, quien es a su vez capitán retirado.
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Nogueira es presidente del derechista Partido Progresistas (PP) y es uno de los líderes más influyentes del llamado “centrón”, un grupo que reúne varias formaciones conservadoras que controlan el Parlamento y a las que Bolsonaro ha intentado aproximarse a medida que su popularidad se hundía.
Ahora ocupará el Ministerio de la Presidencia, uno de los cargos más importantes dentro del Gobierno brasileño, con la misión de mejorar la difícil articulación entre Bolsonaro y el Congreso, y alejar la posibilidad de un juicio político con fines de destitución contra el gobernante.
Desde que asumió el poder en enero de 2019, la Cámara de los Diputados ha recibido alrededor de 120 peticiones para iniciar un proceso de destitución contra Bolsonaro, mucho de ellos por su negacionista gestión de la covid-19, que ya ha matado a más de 550.000 brasileños.
Por otro lado, Nogueira tiene abiertos varios frentes judiciales en su contra por sospechas de haber recibido y distribuido sobornos.
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En este marco, es objeto de dos denuncias penales presentadas por la Fiscalía, en casos relacionados con la Operación Lava Jato, que destapó una enorme red corrupta que desviaba dinero de compañías públicas en beneficio de políticos y empresarios.
Además, las autoridades brasileñas abrieron otras tres investigaciones contra el senador, aunque por el momento no han derivado en denuncias por parte del Ministerio Público.
Preguntado por esas sospechas, Bolsonaro, que una de sus banderas en la campaña electoral de 2018 fue el combate anticorrupción y la ruptura con la denominada “vieja política”, dijo que en caso de que Nogueira sea condenado, abandonará el Gobierno.
“Si (Nogueira) es juzgado y condenado, le aparto de mi Gobierno”, dijo el mandatario el lunes pasado. EFE
