La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), la organización social más importante del país, reiteró este lunes su solidaridad con el Paro Nacional del pueblo colombiano y exigió que se ponga fin a lo que denominó “terrorismo de Estado” en el país cafetero
“Exigimos al Gobierno de Iván Duque parar el terrorismo de Estado, desmontar las estrategias de represión y masacre, respetar los derechos humanos y brindar las garantías para la protesta social legítima”, señaló la Conaie en un comunicado difundido en redes sociales.
Condenó, además, el que calificó como “ataque armado policial y paramilitar a la Minga Indígena, del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC)” que ha dejado, según su versión, a 12 comuneros heridos, “4 de ellos de gravedad”.
Además, advirtió que, según organizaciones de la sociedad civil colombiana, se han registrado al menos 47 personas muertas en los 12 días de movilizaciones, así como 900 detenciones arbitrarias, más de 500 desaparecidos y que 28 personas han quedado con mutilaciones en los ojos.
La Confederación indígena ecuatoriana aseguró en su texto que a los “repudiables ataques armados contra civiles se suman las estrategias mediáticas y políticas para deslegitimar las acciones colectivas de la resistencia pacífica indígena”.
Para la Conaie, lo que pasa en Colombia tiene similitud con lo que ocurrió en Ecuador en octubre de 2019, cuando unas medidas económicas del Gobierno generaron una dura protesta encabezada por el movimiento indígena, que tras dos semanas logró que el Ejecutivo retirara los ajustes.
“Como organización hermana y también en resistencia permanente desde Ecuador, damos toda nuestra solidaridad, respaldo y seguimos de cerca la lucha digna de nuestros hermanos colombinos”, remarcó la Conaie.
El pronunciamiento de la organización indígena ecuatoriana se sumó al que hiciera hoy mismo Amnistía Internacional (AI), que pidió el cese de la violencia contra los indígenas que se manifiestan en Colombia y luego de que el domingo supuestos civiles armados les dispararan en Cali (suroeste).
“Los ataques de civiles armados, algunos en presencia de la policía, en contra de la Minga (marcha) Indígena en Cali son un reflejo de dinámicas de violencia que no cesan en Colombia y que se han acentuado en el contexto de las protestas sociales en el marco del Paro Nacional”, expresó la directora para las Américas de AI, Erika Guevara Rosas.
En esa misma línea, la oficina en Colombia del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos manifestó su rechazo por los “ataques sufridos por la minga indígena en Cali y expresamos grave preocupación”.
“Urgimos porque se investigue y sancione el ataque que deja por lo menos 8 indígenas heridos, entre ellos varias mujeres lideresas y defensoras (…) Llamamos a la calma a todas las personas, especialmente en Cali, y al respeto a la vida y los derechos fundamentales”, expresó la representante en Colombia de esa oficina, Juliette de Rivero, en Twitter. Efe
