El pasado miércoles 17 de marzo, en la ciudad de Cúcuta, el mayor retirado de la Policía Juan Carlos Meneses, testigo clave en el juicio que se surte en contra del ganadero Santiago Uribe, se presentó ante la Sijín de la Policía preguntando si había algún requerimiento en su contra.
En el lugar le informaron que tenía una nueva orden de captura de un proceso relacionado con supuestos delitos de concierto para delinquir con fines de homicidio en asocio con las autodefensas, lavado de activos, hurto de combustible y enriquecimiento ilícito cometidos entre 2001 y 2003.
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En ese momento que le notificaron la orden de captura de inmediato las autoridades procedieron a su captura.
Por su parte, la Fiscalía ordenó al libertad inmediata de Meneses, pues el ente acusador reconoció la competencia exclusiva y prevalente de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) en el caso del testigo.
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Cabe mencionar que Meneses ya había sido condenado por el asesinato del campesino Camilo Barrientos en Antioquia en 1994, razón por la cual se había convertido en el proceso que se le sigue a Uribe en el caso de los ‘Los 12 Apóstoles’.
