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El presidente de EE.UU., Donald Trump, y el aspirante demócrata a la Casa Blanca, Joe Biden, estuvieron inmersos este viernes en un frenesí de mítines y actos en estados del medio oeste de país, vitales de cara a los comicios del próximo 3 de noviembre, con el exvicepresidente liderando las encuestas nacionales con ocho puntos de ventaja.
El mandatario tiene durante esta jornada mítines en Waterford Township, en Michigan; Green Bay, en Wisconsin; y Rochester, en Minesota; mientras que Biden tiene actos en Iowa, Minesota y Wisconsin.
A cuatro días de la votación, ambos candidatos intensificaron los ataques mutuos, con la pandemia de covid-19 de trasfondo, ya que este viernes EE.UU. superó los 9 millones de casos y alcanzó las 229.347 muertes, en medio de un nuevo repunte de las cifras diarias de contagios.
En Michigan, Trump aprovechó para meterse no solo con Biden, sino también con la gobernadora demócrata de este estado, Gretchen Whitmer, que en octubre fue objetivo de un supuesto plan para secuestrarla o asesinarla por parte de una milicia de ultraderecha, tras haber sido blanco frecuente de las críticas de Trump por su gestión de la pandemia.
Dirigiéndose a los trabajadores de un sector clave en Michigan, la industria automovilística, el presidente acusó a Biden de haberles perjudicado cuando fue vicepresidente de Barack Obama (2009-2017).
Biden “está destrozando su industria, pero yo la he traído de nuevo y lo están haciendo muy bien, y ahora, sorprendentemente todavía no sé cómo lo he hecho, la producción de automóviles está siendo más alta que antes de la pandemia. ¿Podría alguien en el negocio automovilístico explicármelo? Porque lo atribuyo completamente a mí”, se vanaglorió Trump.
En ese sentido, destacó que el sector “lo está haciendo bien”, pese a la pandemia y las medidas ordenadas por Whitmer para frenar la expansión del coronavirus.
“Deben conseguir que esta gobernadora abra (el estado), estoy tan cansado de ver a su marido navegando, él quiere salir a navegar. Él dice: ‘Cariño, tienes que abrir este estado, quiero salir’ y él lo hacía antes de que desafortunadamente fuera pillado”, se burló Trump, mientras los asistentes a su mitin abucheaban a la gobernadora.
Y siguió: “No creo que yo le guste (a la gobernadora), y he hecho una gran labor para ella, saben, sobre la covid, el virus chino, lo he hecho fenomenal en todo y Biden ha acuchillado por la espalda a los trabajadores de Michigan y en todo el país”.
Trump ha criticado en varias ocasiones a Whitmer por considerar demasiado estrictas las restricciones que ha aplicado para contener la pandemia e incluso ha instado a sus partidarios a “liberar Michigan”.
A mediados de octubre, trece personas fueron imputadas, entre ellas siete miembros de la milicia de ultraderecha “Wolverine Watchman”, por supuestamente planear el secuestro o asesinato de la gobernadora y de otros funcionarios.
Trump aseguró además en su mitin que el fin de la pandemia “está a la vuelta de la esquina”.
“Está a la vuelta de la esquina (…) y tendremos disponible de forma gratuita una vacuna, y el motivo es que esto no fue su culpa. No fue culpa de nadie. Fue culpa de China”, subrayó el mandatario, quien auguró que EE.UU. regresará a la normalidad en siete meses.
Horas más tarde, en su siguiente mitin en Wisconsin, Trump volvió a insistir en que el final de la covid-19 “está a la vuelta de la esquina”, pese a que este estado ha sufrido un repunte de casos del 41 % en los últimos catorce días, de acuerdo al diario The New York Times.
Aquí, el mandatario volvió a hacer hincapié en sus promesas sobre la vacuna y ridiculizó a Biden por respaldar las restricciones para evitar la expansión de la pandemia.
Biden “está listo para un confinamiento, es decir, ustedes ya están en un confinamiento. Puede que no lo noten tanto. Hey, gobernador, debe abrir su estado aquí”, dijo Trump en referencia al gobernador de Wisconsin, el demócrata Tony Evers.
El presidente se mofó, asimismo, de su rival en las elecciones por centrar gran parte de su campaña en las críticas a la gestión de Trump de la crisis sanitaria.
“Lo cierto es que hemos hecho un trabajo increíble -aseguró Trump-, con nuestros respiradores, las vacunas, los tratamientos… Y todo lo que él hace (Biden), porque no tiene nada más sobre qué hablar porque ninguna Administración en la historia de nuestro país ha hecho lo que hemos hecho nosotros”. Efe