Foto: Registraduría Nacional
Desde la Fundación Paz y Reconciliación (Pares) en cabeza de su director León Valencia, presentó en las últimas horas un informe titulado “Alexander Vega y el negocio detrás de la Reforma Electroral”, donde se presentan graves argumentos en contra del actual registrador Nacional del Estado Civil que lo tendrían bajo la mira de los entes de control por un presunto delito de favorecimiento ilícito al momento de escoger a los funcionarios bajo su poder.
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En un abrebocas del reporte, Pares señala que desde que Vega asumió como el jefe de la Registraduría Nacional, se han presentado más de 1.500 despidos, lo cual ocasionó más de 1.500 nuevas contrataciones, donde se le estaría poniendo la lupa a la labor del funcionario, debido a que en la escogencia de estos nuevos empleos estaría incurriendo en el presunto delito conocido como clientelismo.
Esta falta consiste en la tendencia que tiene un empleador para favorecer, sin la debida justificación, a determinados funcionarios para obtener un puesto en la entidad autónoma administrativa.
“Nombrando en algunos de dichos cargos a fichas de los clanes políticos, contratistas de antaño de la Registraduría y hasta sobrinos de magistrados del Consejo de Estado”, se lee en el informe presentado por la Fundación Pares.
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Dentro de las investigaciones que adelanta esta organización, señalan que se dieron a la tarea para verificar si existían relaciones probadas entre el registrador Alexander Vega y los delegados departamentales que fueron nombrados por el mismo funcionario. De mismo modo, la Fundación Pares quiere esclarecer si además de una supuesta conexión entre el Registrador Nacional y los nuevos empleados de la entidad, tendría otra relación con políticos colombianos.
