Foto: Archivo referencial
El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, volvió a dirigir su atención hacia la situación de violencia que se viene presentando en lo corrido de 2020 en Colombia, señalando a través de un documento presentado el pasado jueves ante el Consejo de Seguridad de la ONU que el panorama sangriento en este país tuvo un pico muy alto en el último mes.
“Estos crímenes están siendo perpetrados principalmente en zonas con escasa presencia estatal, altos niveles de pobreza, economías ilícitas y disputas entre grupos armados ilegales y organizaciones criminales”, se lee en el documento entregado por los datos propiciados desde la Misión de la ONU en Colombia.
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Dentro de este pronunciamiento, la organización internacional reporta que en lo corrido de 2020, hasta el último reporte fichado del 25 de septiembre del presente año, se han registrado en Colombia 42 masacres, 13 en proceso de confirmación, el asesinato de 48 líderes sociales y la verificación de otros 51 atentados en contra de esta comunidad.
Así mismo, el llamado de la ONU se hizo sobre el riesgo permanente que tienen los excombatientes de las extintas FARC que se desmovilizaron a través del acuerdo de paz de 2016, pues Guterres extendió sus preocupantes alarmas sobre este caso.
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Según el secretario general de las Naciones Unidas, 2 de cada 3 exmiembros de la antigua guerrilla, y que no se encuentran adscritos en los espacios de reincorporación destinados por el Gobierno Nacional, se encuentran en un alarmante riesgo de muerte o de no sobrevivir a la crisis económica.
Del mismo modo, se reconoció que la Unidad Nacional de Protección (UNP) mantiene en vilo de respuesta para entregar un sistema de seguridad a por lo menos 400 exmilitantes de las FARC.
