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Uno de los capítulos de discriminación y violencia en contra del personal de la salud que más revuelto ha causado en las últimas horas, fue el del médico intensivista José Julián Buelvas, quien recibió dos coronas fúnebres acompañadas de un panfleto amenazante donde le advertían que saliera de la clínica en la que trabaja o le quitarían la vida.
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Frente a dicho incidente, la Fiscalía General de la Nación anunció que emprendería una investigación para recopilar las pruebas que permitan dar con la identidad de los autores de dichas amenazas en contra del personal de la salud, miembro de la Clínica Materno Infantil Adela de Char de Soledad, Atlántico.
Tal y como lo dio a conocer el alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, desde que se conoció en las últimas horas de la denuncia emprendida por el galeno, se dio la orden a las autoridades de la ciudad para que pudieran llegar hasta el lugar de residencia y velar por su seguridad y la de sus familiares.
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“En las labores de investigación de la Fiscalía y Policía se tendrán en cuenta la versión del médico, algunos videos de seguridad y declaraciones de testigos”, se lee en el comunicado oficial del organismo de control.
Ahora bien, frente al temor que anunciaron los miembros de la Unidad de Cuidados Intensivos de esta institución médica, decidieron renunciar a su puesto para que sus vidas pudieran verse veladas, entendiendo que la amenaza que vivió su colega Buelvas, podría pasarles a ellos.
A continuación, informe completo:
