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Los aficionados al fútbol en España no podrán asistir a los partidos cuando se retome la temporada el 10 de junio tras la interrupción provocada por el coronavirus por razones deportivas y no por motivos de seguridad, dijo el martes por la noche la presidenta del Consejo Superior de Deportes, Irene Lozano.
El Ministerio de Sanidad está analizando los riesgos para los aficionados en regiones donde las posibilidades de infección son bajas, después de que el presidente de Las Palmas, Miguel Ángel Ramírez, dijera que esperaba que los espectadores pudieran asistir a los partidos de su equipo en las Islas Canarias, donde el virus es menos prevalente.
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Pero Lozano dijo que eso crearía una ventaja injusta porque algunos equipos estarían apoyados por sus seguidores mientras que otros en regiones con mayor riesgo de infección tendrían que jugar sus partidos en casa sin espectadores.
“Yo diría que es imposible que entre el público a los estadios las dos primeras jornadas”, dijo Lozano en una entrevista con la emisora de radio Cadena Ser, en la que recordó que el acuerdo alcanzado con la Liga era retomar la temporada con partidos a puerta cerrada.
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“Hay que respetar la integridad de la competición (…) puesto que la Liga es una competición nacional, nos hemos esforzado mucho en todos los sectores en que los entrenamientos fueran acompasados”.
“Es muy importante que en este momento todos lancemos el mismo mensaje. En el momento en que no estén todas las provincias de España en la misma fase (de desconfinamiento), es radicalmente imposible que en unos estadios haya público y en otros no”, afirmó en una crítica velada al presidente de Las Palmas.
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“Lo que ocurra, ocurrirá en todos a la vez”, añadió Lozano, dejando la puerta abierta a que los aficionados regresen una vez se levante el estado de alarma en España que el Gobierno quiere ampliar hasta el 21 de junio.
